Cinco lecciones sobre la adicción que aprendí como ser querido
Publicado el 28 de noviembre de 2018
Estas son las cinco conclusiones que escuchamos con más frecuencia de los seres queridos que entrenamos.
1. Puedo tener un mejor día a día aunque él/ella no se mejore
Al igual que quienes sufren de adicción, los seres queridos a menudo se desconectan de las actividades y relaciones saludables. Es importante mantener una rutina saludable y practicar el cuidado personal. Esto también modelará un cambio saludable para la persona con adicción.
2. Hay una variedad de formas en que las personas pueden recuperarse de la adicción
A menudo, existe la creencia de que las personas deben someterse a un tratamiento hospitalario durante 30 días para superar la adicción. En realidad, muchas personas no necesitan tratamiento hospitalario. Las formas de apoyo menos intensivas, como el asesoramiento, los grupos de autoayuda o el entrenamiento entre compañeros, pueden ser suficientes.
3. Ayudarme a mí mismo ayuda a la otra persona
Es importante estar saludable para poder ayudar a alguien más. Volverse más feliz, más fuerte, resistente, más informado: este crecimiento personal también impacta positivamente la persona que lucha contra la adicción.
Las personas que dan prioridad a su propio bienestar tendrán una ventaja cuando se trata de manejar los desafíos de la adicción de un ser querido.
4. La recaída no significa que él / ella está comenzando de nuevo
En casi todos los casos, una recaída no significa que la persona comience de nuevo desde el principio. Puede haber una recurrencia de los síntomas, como el uso de sustancias, pero eso no significa que él o ella no haya logrado un progreso considerable en la recuperación. La adicción es una enfermedad crónica muy similar a la diabetes tipo II o la hipertensión, lo que significa que requiere un control de por vida.
Aunque desalentador, una recurrencia puede servir como una buena recordatorio para reenfocar y volver a comprometerse con el bienestar. Es importante mantener estos contratiempos en perspectiva y mantener una actitud positiva sobre el progreso de una persona.
5. Puedo dejar de preocuparme por habilitar
No tiene nada de malo querer ayudar a alguien en tu vida que está luchando contra esta enfermedad. Hay comportamientos que son saludables y hay comportamientos que no son saludables; no todo lo que permite es malo.
La etiqueta de “facilitador” es muy perjudicial y puede paralizar a los seres queridos que no saben cómo ayudar. Lea más sobre las etiquetas dañinas aquí.
Si alguien que le importa está luchando contra la adicción, no está solo.